domingo, 25 de enero de 2009

“Panorama Universal, Tierra Santa y Armenia” – 1842 -1838


Portada


Encuadernación




A veces surgen muestras de la intemporalidad de los libros en general y de los libros antiguos en particular. Esto ocurre cuando por algún hecho o noticia actual, uno de esos libros que tengo un poco olvidado en mi biblioteca, cual faro alejandrino, luce su tejuelo entre la penumbra de los pardos lomos de sus compañeros de balda. Y este es el caso de este ejemplar de la colección decimonónica de geografía e historia, “Panorama Universal” que ya os presente con el artículo dedicado a la Historia de la Oceanía. Este volumen que contiene dos tomos de la colección, “Historia de la Palestina o Tierra Santa” e “Historia de la Armenia”, nos ayuda a intentar comprender el actual problema judeo-palestino y la crudeza de los enfrentamientos en la franja de Gaza. Evidentemente no se trata de juzgar tan penoso capítulo de la Historia, pero sí de descubrir en la vieja Historia de Palestina, que se encuentra encerrada entre las oxidadas páginas de hace ciento sesenta años de este libro, como era su país, sus anales, su geografía, sus costumbres, etc, muchos años antes de la ocupación israelí. Descubrimos lo antiguo de este enfrentamiento cuando Gaza, hace tres milenios era tierra de filisteos, eternos enemigos del judaísmo. Y tal vez subyazca en las mentes de Israel y Palestina, los pasajes de la viejas escrituras.


Retiro de los Apóstoles. Valle de Josafat



Monedas del tiempo de los Macabeos

Tras este preámbulo paso a describiros brevemente este volumen. Resulta curiosa la diferencia de cuatro años entre la publicación de la historia de la Armenia y la Historia de Palestina, y también que aparezca en primer lugar, la última publicada. En la Historia de Palestina no aparece autor, simplemente indica que se halla traducida la obra al castellano por una sociedad literaria, y fue impresa en Barcelona por la Imprenta del Liberal Barcelonés en 1842. En la Historia de la Armenia indica el autor “Eujenio Boré, individuo de la academia armenia de San Lázaro de Venecia y del consejo de la sociedad asiática de París.”, y fue impresa en Barcelona por la Imprenta del Guardia Nacional en 1842, y traducida al castellano por sus editores.




Plano de la Iglesia del Santo Sepulcro


Capilla del Santo Sepulcro en Jerusalem

Constan ambas partes de multitud de litografías, siendo en total en este volumen 103 y 4 mapas., con 286 y 139 Págs. respectivamente.
La historia de Palestina comienza desde los tiempos de Abraham, siguiendo el hilo de la Historia Sagrada, pero ampliando datos según va avanzando en el tiempo hasta final del siglo XIII, narrando toda la historia de las cruzadas. Todo ello como capítulo único. Luego hay un capítulo titulado “Cuadro de la actual Palestina” en el que al final concluye con unas páginas tituladas “Concluiremos la historia de la Palestina dando unas lijeras nociones de las principales prácticas y leyes de los Judíos”.


Gaza




Mapa de Palestina


Palacio de los Sultanes en Gaza

En la Historia de la Armenia, comienza con una introducción geográfica y continúa con trazos de su historia, costumbres, personajes, literatura y lengua. Finalizando con una descripción de su iglesia y de la actual organización política y social del país.
La encuadernación es la misma que la de la historia de la Oceanía. Holandesa con puntas, los planos en papel de aguas en tonos azulados y la piel de pasta española. En el lomo dos tejuelos, verde y rojo, y algunos hierros decorativos.


Obispo Armenio confesando (detalle)

3 comentarios:

Galderich dijo...

Algún día descubriremos que la imprenta del siglo XIX es muy apasionante con libros como este que intentaban acercar el mundo a aquella pequeña burgesia que empezaba a saber leer y escribir y tenía auténtica ansia de aprender.
Las técnicas editoriales también ayudaron con ilustraciones como las de estos libros.
Són un auténtico viaje al pasado... y muchas veces como dices, al presente.

Diego Mallén dijo...

Amigo Lamberto: Muy oportuno el artículo y un preámbulo muy emotivo sobre la soledad de algunos libros a los que castigamos hasta que un día su tejuelo, como bien dices, es el faro amigo que nos llama.
Asunto espinoso y de actualidad sobre el que reflexionas y en el que según a quien escuches puedes comprender los motivos y la situación tremenda por la que están pasando.
Saludos bibliófilos, Diego.

lamberto palmart dijo...

Amigo Galderich, en esto de la bibliofilia, como en todo, nunca dejas de aprender y los libros del XIX posiblemente por su cercanía en el tiempo, te dan sorpresas agradables, que hacen que los disfrutes con pasión. Gracias una vez más, por tu amable comentario.

Amigo Diego, los libros están ahí y estoy convencido que son ellos los que nos buscan. Cada momento de nuestra vida, cada inquietud que nos perturba, tiene su fiel reflejo en un libro, que como un candil, ilumina nuestro pensamiento.

Saludos bibliófilos a ambos.